Cirugía Asistida Computacionalmente. Una vez que se logran los objetivos ortodóncicos, se inicia la planificación de la cirugía. Es en esta etapa donde se estudian las anomalías de los maxilares en los tres sentidos del espacio, donde no sólo pueden haber alteraciones en sentido antero-posterior, sino que también en sentido transversal y/o vertical.

Tradicionalmente, esto desde hace mucho tiempo se realiza a través de todo un proceso de modelos de yeso, lo cual era un método confiable, pero no exento de errores. Si entendemos que es una cirugía de milímetros, esto es, que se requiere una gran precisión para posicionar los maxilares en la ubicación adecuada y al mismo tiempo obtener una oclusión ideal, la planificación es crucial.

Es por esto que realizamos dicho proceso a través de programas computacionales, que a partir de un Cone Beam (una especie de scanner maxilofacial), obtenemos una reproducción 3D de la cara del paciente. En base a esto, es que realizamos una cirugía virtual, donde corregimos los problemas de cada caso, visualizamos eventuales problemas que podríamos tener en pabellón y obtenemos una imagen aproximada de los resultados finales.

Esto no sólo permite una seguridad por parte del cirujano, sino que además nos da una precisión incomparable en la ubicación final de los maxilares. Lo interesante de este sistema, es que además de que nos entrega información valiosa para cada caso, el programa genera guías quirúrgicas hechas en Chile, para llevar nuestra planificación desde el mundo virtual al pabellón.